Cuando Elon Musk compró Twitter, una de las cosas que se propuso fue convertir la aplicación en una «súper app». Así yo sólo conozco una, y no mucho porque no la uso, y es WeChat. En China hay algunas más, y desde ellas se pueden enviar mensajes, llamar, videollamar, realizar pagos… Y Musk ha dado ya el primer paso para convertir a X, antes Twitter, en algo parecido. ¿Lo conseguirá?
Siendo honesto, yo tengo mis dudas. X es ahora muy confuso. La opción de pago que te da la verificación con la que te puedes equivocar si no tienes claro qué es cada una, el icono del Doge Coin que estuvo un tiempo supongo que para divertir al magnate o subir el precio de la cripto moneda, que los nuevos usuarios van a tener que pagar 1€ para poder publicar, algo que se supone que evitará la proliferación de bots, y eso por no mencionar que hay servicios, proyectos y todo tipo de usuarios que han decidido abandonar la red social.
X abre las videollamadas en iOS
Pero lo cierto es que X aún no ha quebrado y, en general, se podría decir que sigue usándose con normalidad. Aunque a partir de ahora van a empezar a llegar los cambios serios, o eso entendemos tras la activación de las llamadas y videollamadas.
En un principio sólo están disponibles para iOS/iPadOS, y para poder hacer o recibir llamadas, una vez nos llegue la activación, hay que ir a la foto de nuestro perfil, ir a los ajustes de privacidad, elegir el menú de privacidad y seguridad, luego a la opción de mensajes directos y, allí, activar o desactivar la opción. Se puede elegir entre recibir llamadas de nuestra agenda, cuentas que seguimos o sólo usuarios verificados. Ahora mismo parece que no puede llamarnos cualquiera y no hay opción para que así sea.
Con la posibilidad de enviar mensajes desde ¿siempre?, la cronología o muro y esto de las llamadas, el siguiente paso podría ser el de los pagos, pero para eso habrá que esperar a próximos movimientos que ordene el magnate.